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DÍA 46

¡Bendecido día, amigo lector! Otra vez nos encontramos en esta página para continuar con la lectura diaria de la Biblia, con el fin de leerla completa en el año.
En el capítulo 49 del Génesis, Israel bendice a todos y a cada uno de sus hijos, da instrucciones para su sepultura y finalmente, muere.
En el capítulo 28 de Mateo, con gozo leemos acerca de la resurrección de Cristo. Como se apareció a María Magdalena y a María y luego a sus discípulos. A estos mandó a hacer discípulos por todo el mundo, bautizándolos y enseñándo la doctrina que Él les había mandado.
Y, como siempre, continuamos con los Salmos y los Proverbios.
¡Qué Dios te bendiga!
Profecía de Jacob acerca de sus hijos
1Y llamó Jacob a sus hijos, y dijo: Juntaos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los días venideros.
 2 Juntaos y oíd, hijos de Jacob,
Y escuchad a vuestro padre Israel.
 3 Rubén, tú eres mi primogénito, mi fortaleza, y el principio de mi vigor;
Principal en dignidad, principal en poder.
 4 Impetuoso como las aguas, no serás el principal,
Por cuanto subiste al lecho de tu padre;
Entonces te envileciste, subiendo a mi estrado.
 5 Simeón y Leví son hermanos;
Armas de iniquidad sus armas.
 6 En su consejo no entre mi alma,
Ni mi espíritu se junte en su compañía.
Porque en su furor mataron hombres,
Y en su temeridad desjarretaron toros.
 7 Maldito su furor, que fue fiero;
Y su ira, que fue dura.
Yo los apartaré en Jacob,
Y los esparciré en Israel.
 8 Judá, te alabarán tus hermanos;
Tu mano en la cerviz de tus enemigos;
Los hijos de tu padre se inclinarán a ti.
 9 Cachorro de león, Judá;
De la presa subiste, hijo mío.
Se encorvó, se echó como león,
Así como león viejo: ¿quién lo despertará?
 10 No será quitado el cetro de Judá,
Ni el legislador de entre sus pies,
Hasta que venga Siloh;
Y a él se congregarán los pueblos.
 11 Atando a la vid su pollino,
Y a la cepa el hijo de su asna,
Lavó en el vino su vestido,
Y en la sangre de uvas su manto.
 12 Sus ojos, rojos del vino,
Y sus dientes blancos de la leche.
 13 Zabulón en puertos de mar habitará;
Será para puerto de naves,
Y su límite hasta Sidón.
 14 Isacar, asno fuerte
Que se recuesta entre los apriscos;
 15 Y vio que el descanso era bueno, y que la tierra era deleitosa;
Y bajó su hombro para llevar,
Y sirvió en tributo.
 16 Dan juzgará a su pueblo,
Como una de las tribus de Israel.
 17 Será Dan serpiente junto al camino,
Víbora junto a la senda,
Que muerde los talones del caballo,
Y hace caer hacia atrás al jinete.
 18 Tu salvación esperé, oh Jehová.
 19 Gad, ejército lo acometerá;
Mas él acometerá al fin.
 20 El pan de Aser será substancioso,
Y él dará deleites al rey.
 21 Neftalí, cierva suelta,
Que pronunciará dichos hermosos.
 22 Rama fructífera es José,
Rama fructífera junto a una fuente,
Cuyos vástagos se extienden sobre el muro.
 23 Le causaron amargura,
Le asaetearon,
Y le aborrecieron los arqueros;
 24 Mas su arco se mantuvo poderoso,
Y los brazos de sus manos se fortalecieron
Por las manos del Fuerte de Jacob
(Por el nombre del Pastor, la Roca de Israel),
 25 Por el Dios de tu padre, el cual te ayudará,
Por el Dios Omnipotente, el cual te bendecirá
Con bendiciones de los cielos de arriba,
Con bendiciones del abismo que está abajo,
Con bendiciones de los pechos y del vientre.
 26 Las bendiciones de tu padre
Fueron mayores que las bendiciones de mis progenitores;
Hasta el término de los collados eternos
Serán sobre la cabeza de José,
Y sobre la frente del que fue apartado de entre sus hermanos.
 27 Benjamín es lobo arrebatador;
A la mañana comerá la presa,
Y a la tarde repartirá los despojos.
Muerte y sepelio de Jacob
28Todos éstos fueron las doce tribus de Israel, y esto fue lo que su padre les dijo, al bendecirlos; a cada uno por su bendición los bendijo. 29Les mandó luego, y les dijo: Yo voy a ser reunido con mi pueblo. Sepultadme con mis padres en la cueva que está en el campo de Efrón el heteo, 30en la cueva que está en el campo de Macpela, al oriente de Mamre en la tierra de Canaán, la cual compró Abraham con el mismo campo de Efrón el heteo, para heredad de sepultura. 31Allí sepultaron a Abraham y a Sara su mujer; allí sepultaron a Isaac y a Rebeca su mujer; allí también sepulté yo a Lea. 32La compra del campo y de la cueva que está en él, fue de los hijos de Het. 33Y cuando acabó Jacob de dar mandamientos a sus hijos, encogió sus pies en la cama, y expiró, y fue reunido con sus padres.
La resurrección
1Pasado el día de reposo, al amanecer del primer día de la semana, vinieron María Magdalena y la otra María, a ver el sepulcro. 2Y hubo un gran terremoto; porque un ángel del Señor, descendiendo del cielo y llegando, removió la piedra, y se sentó sobre ella. 3Su aspecto era como un relámpago, y su vestido blanco como la nieve. 4Y de miedo de él los guardas temblaron y se quedaron como muertos. 5Mas el ángel, respondiendo, dijo a las mujeres: No temáis vosotras; porque yo sé que buscáis a Jesús, el que fue crucificado. 6No está aquí, pues ha resucitado, como dijo. Venid, ved el lugar donde fue puesto el Señor. 7E id pronto y decid a sus discípulos que ha resucitado de los muertos, y he aquí va delante de vosotros a Galilea; allí le veréis. He aquí, os lo he dicho. 8Entonces ellas, saliendo del sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo a dar las nuevas a sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos, 9he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. 10Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, y allí me verán.
El informe de la guardia
11Mientras ellas iban, he aquí unos de la guardia fueron a la ciudad, y dieron aviso a los principales sacerdotes de todas las cosas que habían acontecido. 12Y reunidos con los ancianos, y habido consejo, dieron mucho dinero a los soldados, 13diciendo: Decid vosotros: Sus discípulos vinieron de noche, y lo hurtaron, estando nosotros dormidos. 14Y si esto lo oyere el gobernador, nosotros le persuadiremos, y os pondremos a salvo. 15Y ellos, tomando el dinero, hicieron como se les había instruido. Este dicho se ha divulgado entre los judíos hasta el día de hoy.
La gran comisión
16Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado. 17Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban. 18Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
 22 Anunciaré tu nombre a mis hermanos;
En medio de la congregación te alabaré.
 23 Los que teméis a Jehová, alabadle;
Glorificadle, descendencia toda de Jacob,
Y temedle vosotros, descendencia toda de Israel.
 24 Porque no menospreció ni abominó la aflicción del afligido,
Ni de él escondió su rostro;
Sino que cuando clamó a él, le oyó.
10 El temor de Jehová es el principio de la sabiduría,
Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia.
 11 Porque por mí se aumentarán tus días,
Y años de vida se te añadirán.
 12 Si fueres sabio, para ti lo serás;
Y si fueres escarnecedor, pagarás tú solo.